Ivankovà es el proyecto en solitario de Irene de la Cueva. Nace en otoño de 2015 como una forma de autosanación emocional y se materializa en la creación de un EP autoproducido de cuatro canciones, donde utiliza el mantra y la repetición para crear unas atmósferas determinadas. Sus herramientas son la voz, el teclado y la creación de sonidos electrónicos a partir de la transformación de sonidos orgánicos. Estilísticamente el proyecto se integra dentro del ambient o el dark ambient, así como de la música new age, encontrando referencias también dentro de la música sacra y ritual. Durante su periodo de residencia en Matadero Madrid el objetivo de Ivankovà fue producir un disco dentro de los mismos parámetros estilísticos y estéticos pero ahondando en las técnicas de producción, musicales e interpretativas, poniendo especial interés en las composiciones vocales y corales y en las bases electrónicas.